jueves, 3 de agosto de 2023

Puta, ¿de verdad?

Trabajar de puta. Esta es una fantasía recurrente. Muchas mujeres (no sé cuantificar ese muchas) fantaseamos con ella. Muchos hombres fantasean con que su mujer lo sea. Por realizar la fantasía no me refiero a montar un piso, preparar una web y darse de alta en la seguridad social. Basta con salir un día por una zona adecuada, con el atundo adecuado y esperar a recibir ofertas. Para cumplirla, ni siquiera es necesario aceptar esas ofertas. El morbo de exhibirse buscando clientela puede ser suficiente. Pero a la hora de la verdad ¿cuántas y cuántos estamos dispuest@s a ir hasta el final y saltar de la fantasía a la realidad?
En mi caso, mi Amo ha sido el promotor de mi intento de cumplirla y un desconocido ha sido el artífice que llevarla hasta el final.