Llega el día en que Mamá Noel intenta hacer felices a los demás. Yo estoy preparada para intentarlo.
Siempre me ha resultado curiosa la pregunta y la reacción ante la respuesta.
Sí, ma masturbo. En mi día a día hay mucho sexo, sí, pero también necesito mi espacio, mi tiempo, desconectar de "obligaciones con los demás" y pensar solo en mí.
Y sí, me masturbo a diario (salvo orden expresa de mis Am@s) varias veces.
Con la edad que tengo, puede que esté cercano el día en el que el sexo deje de ser importante para mí.
Pero mientras ese día llega ...
Las cosas no son cómo empiezan sino cómo acaban.
Mi Amo me dice, ponte elegante, vamos de comida.
Y al final la comida es de otro tipo al esperado.
Ya van varias veces que me preguntan por correo si yo cobro o he cobrado por follar.
La respuesta no es sencilla. A ver si me puedo explicar.
En primer lugar, cuando se me califica o me autocalifico como "puta" es una calificación en el sentido coloquial del término: follo mucho, follo con muchos (hasta antes del virus, claro) y mi lista de los "servicios" que me pueden exigir es larga.
En segundo lugar, nunca he pedido dinero por follar. Follo por placer, mío y de mis Amos y por derivación, de quienes me follan.
Finalmente, ¿he recibido alguna retribución material por follar? Sí. En una ocasión, dos desconocidos (desconocidos para mí pero creo que mi Ama lo organizó) me dieron un sobre con dinero después de follarme en un hotel. En varias ocasiones, un pequeño grupo de conocidas me ha hecho regalos (bolsos, carteras, zapatos) después de alguna cita íntima.
¿Cobraría por follar? No. Para mí el sexo es una liberación, disfruto follando, soy feliz follando. Cobrar convertiría el placer en obligación y eso no me da morbo.
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| Esto, o lo haces por placer o no lo disfrutarás. |
Es difícil de explicar.
Al principio aparece la vanidad, sentirme deseada a mi edad es algo muy intenso.
Después aparece algo de vergüenza, quienes me van a follar saben que pueden pedirme lo que deseen, eso me hace sentir pequeña, poca cosa, algo de usar y tirar sin mayor valor.
Pero luego, cuando toman posesión de mi cuerpo, cuando los pensamientos de mis folladores desconectan del día a día, de sus problemas y preocupaciones y se centran solo en obtener placer, cuando sé que yo soy quien consigue esa desconexión, esos momentos de felicidad, tal vez breves pero felices, en esos momentos me siento la persona más importante del mundo.
Hay quien compra su barra de labios resistente al agua para poder estar todo el día de fiesta sin problemas.
Mis requerimientos de reistencia para un pintalabios son un poco distintos,
